NUEVA MAREA ROJA EN LA SUBBÉTIKA TRAIL DE ZUHEROS

Alanís, Salva, José Antonio, Kanijo, José Manuel, Goyo, Mónika, Serafín y Neretva, Sólo un puñado de todas las kabras destakadas en Zuheros. Kuando el presentador dijo que un autobús kargado de kabras había llegado al pueblo, todo el mundo se kedó bokiabierto.  (¡¡¡Y no es para menos!!!)

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¡¡Bueno... Ahí voy con el post!! 

Semana larga y malísima... Muchas horas despierto, conduciendo  y pasando sueño... Pero va pasando la semana, y aún no sé si podré estar en la línea de salida. Llega el jueves, camino de Madrid, y me dan el notición... Respiro hondo y digo: «Ahora sí»... Y empiezo a pensar en la carrera...

No andaba nada fino la semana anterior. Me dio un pinchazo la rodilla y no me encontraba totalmente recuperado; pero decidí estar en la foto del arco de salida. Llegué a Córdoba el viernes, ya de madrugada: a las 4:30, y los nervios no me dejaron dormir; pero, por lo menos, pude descansar. Estuve todo el día pensativo: no sabía cómo me podría ir... ¡Nunca había corrido un trail!...

Domingo, 5:30, suena el despertador. Bueno, ¡¡¡vamos!!! Concentrado, pensativo, me voy vistiendo... No me debe de fallar nada... Lo repaso todo, y en nada, empiezo a despertar a la familia... Y por fin, camino a Zuheros... Llegamos allí y nos pusimos a buscar aparcamiento como locos... Y por fin, en cola para recoger el dorsal. -«¡¡¡Ya lo tengo!!!» Ahora, ya no hay vuelta atrás... Empiezo a ver y a saludar a toda la gente que conocía. Paso por el control y ahora si: ya estamos en el cajón de salida. 

Minuto de silencio... y por fin, ¡pistoletazo! ¡Vamos, vamos!!! La gente sale como "loka", y yo, me decía para mí: «¡¡Si queda mucha carrera!!»... Pero bueno, ahí vamos... Dani, José y Jesús empiezan a tirar, pero yo prefiero coger mi ritmo. Voy entrando en calor por la Vía Verde, y de golpe, ahí tenemos la primera cuestarraka... Poco a poco voy subiendo y me voy encontrando mejor. Parece que esto irá bien. Va transcurriendo la carrera y voy manteniendo mi marcheta, pero ya no doy más de si. Veo a Clemen  que iba fatal... pero no la puedo ayudar. Tiene un mal día...

Me enfrento a un continuo de subidas y bajadas; cambios de ritmo que me hacen polvo... pero  me hacen volar la imaginación y empiezo a recordar todas las salidas que hemos hecho juntos y los buenos momentos que he pasado desde que os conozco, mis kabrillas lokas...

Y  ya por fin, alcanzo el último avituallamiento... Iba acalambrado "hasta las cejas"... pero veo el Reflex y, ni corto ni perezoso, me bajo las mallas y las medias y me  rocío bien, y  continúo. Estamos en el Km 26. «¡¡¡Vamos Campeón!!! ¡Que ya lo tienes ahí!...»


Último km, bajada, y ahora escaleras y digo: «¡¡¡Madreeee! ¡¿Y el ascensor?!!» Bueno, vamos "parriba". Paso el túnel y me encuentro a mi hijo...: se me quitaron todos los dolores y calambres que llevaba. Y juntos de la mano, hasta la meta... ¡¡¡Venga papá, que ya hemos llegado!!! Se me saltan dos lagrimones y respiro hondo... ¡¡¡Lo he conseguido!!!


Quiero agradeceros a tod@s todas vuestras felicitaciones y vuestros halagos, y el apoyo recibido que es mi pilar fundamental para continuar y no rendirme. 

Un fuerte abrazo y ¡¡NOS VEMOS EN LA PRÓXIMA!!!

FRANCISCO JAVIER RUANO.